lunes, 18 de mayo de 2020

Mi novio me dijo que no dejara de escribir.
Eso realmente me inspira.
Me dan ganas de escribir lo que sea por más tonto que parezca.

Me da asco el teclado de la compu, necesito limpiarlo pero me da mucha flojera ir por un trapo y por un aspersor para limpiarla. Así que mejor me lavaré las manos después.

"Dicen que siempre vuelves al lugar dónde fuiste feliz"
Yo ya tengo tantos lugares... tú. El baile, mis letras.
Es bonito cuando tu me incitas a querer hacer las otras dos cosas.
Cuando me haces brincar mis propios obstáculos.

Quizá algún día me atreva a recitar un escrito mío y publicarlo.
A veces no le veo sentido porque es como querer reconocimiento.
Y en realidad no lo necesito.
Me gusta estar aquí, tranquila.

Me gustan las noches que no tengo tanto sueño y puedo darme el tiempo de escribir.
Pero recitar quizá hasta a mi misma me serviría para entender aún mejor lo que siento.
Para liberarlo.

He vuelto a bailar. De vuelta los chassé, pliés y relevés.
Me relaja, por fin le vuelvo a tomar el cariño que se merece.
Reencontrarme con mi cuerpo y finalmente aceptarme tal cual soy.
Con mi fuerza, mi flexibilidad y mis tallas.
En esto también tuvo que ver mi novio jiji.

A veces me gusta acordarme de Francia y otras me hace sentir frío y mejor no lo pienso.
A veces la soledad quema.
Tus demonios tienen el silencio que hace falta para gritar.
Y los enfrentas porque los enfrentas, porque no hay de otra.

Aquí ni en cuarentena me doy oportunidad de escucharlos a veces.
Es impresionante cómo algunas personas tienen la capacidad de alterarte con solo escucharlas un segundo.
Y sin embargo... otras te dan paz, te dan calma y serenidad.
Creo que eso es lo que uno debe buscar en la vida.
Más allá de la "felicidad" la "alegría" y las emociones...

La estabilidad, la calma, la paz.
Esas cosas no tienen precio... valor....
El mundo ya esta demasiado loco como para buscar más caos.
Bueno... quizá eso pienso ahorita que estoy cansada y recostada en mi cama... quizá en otra ocasión quiero toda la adrenalina del mundo.

Así es... soy rara.




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