lunes, 24 de febrero de 2020

"Tengo el corazón a medias
Me gusta salir cuando llueve en la calle y escribirte versos.
Me voy a morir sin poder conocer entero el universo.
(...) Y yo sigo tumbado esperando un beso
Sueño, despierto pero a la vez me vuelvo loco.
Cuando llueva recordaré todo lo que te juré aquel día en tu salón...
(...) En la moto, niños hablando de amarse sin saber lo que es el amor.
Y aunque ya te haya olvidado y a ratos me vaya un poquito mejor... sigo con ese ... y solo lo lleno con tinta y alcohol"

"Quise ser... risa para ti, brisa para ti, todo para ti.
Terminé... por tener que fingir cuando te perdí.
(...) Bueno... la pena esta de vuelta.
(...) Mierda, debí de estar alerta. 
Me culpo a las molestias, me toca pedirme perdón.
Y... ¿a dónde voy? ¿a dónde voy yo? 
(...) ¿A dónde voy? ¿A dónde voy yo?
Digo que te olvido y te compongo otra canción.
(...) Siempre te tuve más en cuenta que a mis propias mentas y hoy el karma venga mi error
Sé que si te tuviera cerca, mi mente y su ginebra bebería de la tentación"

Y quiero volver a mis cabales... no te pediré de vuelta las llaves.
Un elixir a mis heridas.







jueves, 20 de febrero de 2020


"Everybody close your eyes and travel into the place in the back of your mind
It's A place where memories hide and my thoughts combine
I see places and thousands of faces all at the same time"
Hoy me siento extraña
Como incompleta
Quizá escribirlo me ayude a comprender.
Comprenderme.

Tengo desde ayer... quizá desde el fin de semana recordando viejos tiempos.
Momentos no precisamente agradables.
Como los momentos en que me sentía sola y frágil y buscaba refugiarme en mi música, mis libros y mis escritos.
Quizá por eso ha vuelto Linkin Park, Paramore y Falling Up.
Creo que fueron los tiempos en que empecé este blog.
Porta, la casa de mis abuelitos y mi libreta.
Me acuerdo de Hugo, de Alex, de Luis y sabe por qué hasta de Azalea.

Hugo me gustaba en la primaria, encontraron una carta que yo le había escrito a mi amiga la del aseo. Pensaba dársela en el recreo. En la carta, yo le contaba como yo, en mi loca percepción, juraba que Hugo me había coqueteado. La carta se me cayó. Cristina la leyó y fué corriendo a contarle a todos los popus.

No me la acabé con Hugo y con Alex.
Desde ahí, Hugo siempre se me quedaba viendo con cierto aire prepotente pero a la vez curioso.
Como si no pudiese creer que alguien como yo me fijara en él y eso le causaba como cierto interés en mi y al mismo tiempo quisiera tomar una pose de inalcanzable porque le diera pena admitir que era raro que a mi me gustara.
Alex... como lo odiaba, feo, naco y sin chiste.
Me veía como si fuera poca cosa. Como si con solo verme, le diera como asco.
Luis lo conocí hasta la secundaria, era de mis mejores amigos y medio depresivo, por más que intento recordar cuál era su issue no logro recordar (ya recordé... no le caía bien a los "hombres" machos del salón porque era más de dibujos, música y videos en lugar de footbool y se burlaban de él, es chistoso ver que "el grupo de los popus" no maduró de la primaria a la secundaria) Hasta que empezó a andar con Natasha y ya lo veía más feliz. Era un enamoradiso.
Gracias a él profundicé más con Eminem y con Armin Van Buuren y BassHunter.
Amaba tanto Coldplay como yo y disque ibamos a ir a un concierto de ellos cuando viniera.
Cuando por fin vinieron, si hablamos pero tristemente fue solo para tristear por la depresión de no poder ir.
Ya no lo encuentro en ninguna red social.
Ni Facebook ni instagram.
Como si se lo hubiera tragado la tierra.

Y Azalea... la verdad no tengo idea por qué salta a mi cabeza.
Solo me acuerdo de ella brincoteando con Jessica, par de bullys "buena onda".
Molestaban mucho a Rebe.
Ahora, podría jurar que a Azalea le gustaba Rebe.

A veces pienso que debí ir a la "reunión" solo para chismear.
Y para cerrar ciclos en mi cabeza.
Esas canciones me han acompañado en los momentos más tristes de mi vida.
Las escucho cuando tengo mucho que necesito sacar pero que no sé cómo canalizar.
Es innevitable que mi pasado venga a mi tras escucharlas.

Todas esas personas y el Colegio Guadalajara.
Tengo tantas ganas de volver a entrar.
Recorrerlo y buscar los lugares en los que me escondía en el recreo cuando no tenía con quién juntarme.
Hoy... trato de conectar con esa Gaby que tenía miedo.

Supongo que porque hace mucho tiempo que no tenía miedo.
 Y hoy que lo vuelvo a sentir... como que necesito alguna clase de apoyo.
Yo no sé si Gaby de la primaria y particularmente de la secundaria que es la que más sufrió podrían ayudarme.

Quizá solo a recluirme como antes lo hacía. Y es que a veces siento que necesito reencontrarme a mi misma.
Y justo en ese periodo de mi vida es cuando más perdida estuve y cuando me tuve que encontrar.

Luego doy saltos a Francia en las que a veces la soledad era reconfortante y trato de conectar todo con esta Gaby que tengo hoy aqui frente al espejo.

A veces verte en el espejo te dice tantas cosas de ti mismo.

Pero hoy no entiendo qué me dice a mi.

jueves, 13 de febrero de 2020

Si hasta las miradas chocan... que no choquen los carros.
Solo tengo que cerrar los ojos y puedo recordar los momentos más bonitos que he vivido a tu lado.
Lo que pasa es que se nos olvidan las cosas.
En toda perla, hay un granito de arena.
Y gracias a eso, hoy estamos aquí.

Pero me canso de los Jab's 
No te detienes a pensar cuando me los das. 
Y aunque soy más fuerte de lo que pienso.
Todos tenemos un límite.
Hasta las peleas, solo tienen 12 rounds.

viernes, 7 de febrero de 2020

A veces es mejor no pensar ni deshilar cosas.

Nunca puedo enojarme con las personas, siempre les tengo como compasión porque prefiero analizar el por qué hacen algo que lastima y termino llegando a la conclusión que solo es el reflejo de alguna inseguridad, un complejo... o simplemente sus sentimientos en estado puro.

Si ni ellos pueden controlarlo hasta dejarlo aflorar con el resto de personas que los rodean.
¿Por qué voy a querer yo que se comporten de cierta forma en específico hacia mi?

Solo puedes enfocarte en ti mismo,

En darte cuenta por qué te afectó lo que hicieron, qué genera.
Y no solo hablo de tenerte paciencia con las emociones incontrolables que pueden fluir sino descubrir qué te esta diciendo de ti mismo esa situación. Y poder manejarla.

Calmarte, como sea que le tengas que hacer pero calmarte.
Correr, bailar, gritar, romper cosas, escribir, hablarle a alguien pero calmarte y sobre todo no hacer nada. Porque el 99% de las veces que reaccionas a cosas que te hace otra persona y que te afecta, terminas arrepintiéndote.

Encontrarte, llenarte de autoconfianza, autoseguridad. Darte cuenta de tu propio valor, tu lugar en la situación y el papel que tu quieres llevar a cabo en cada momento de la vida.

Luchar por superarte y ser mejor persona, usando esa situación para intentar crecer.

Al final de cuentas, somos mucho más fuertes de lo que pensamos.
Se necesita madurez y fuerza de voluntad para resistir a nuestra impulsividad.

Y yo considero que las tengo.

Así que basta ya.