martes, 14 de noviembre de 2023

 Considero que nunca es bueno ir contra la corriente. 

Considero que es mejor mantener la calma. 

No es que no tenga ambición, que no tenga ánimos de transformarme ni de salir de mi zona de confort.

Es mucho más profundo que eso. 

Lo que sucede es que tengo una visión diferente, decido ver desde la abundancia y no la limitación. 

No pienso que tengo que luchar antes que se me acaben las cosas. 

No pienso que las oportunidades solo llegan una vez y si no la tomé ya valió. Arruiné mi vida.

Creo en un Dios de la abundancia que tiene un plan perfecto para todos nosotros. 

Creo en que para todos hay un destino especial, cosas que vivir y aprender y no pienso que tenga que estar desgastándome emocionalmente con intentar ganar en una guerra que a veces parece perdida. 

Pienso que mi transformación no tiene por qué necesariamente ser dolorosa. Pienso que a veces se trata de realmente conectar con uno mismo.

Quiero decir supongo que si algunas mujeres se hubieran rendido desde un principio, no tendríamos las oportunidades que tenemos ahorita. No tendría tanto avance la mujer contra el machismo. 

Pero al mismo tiempo... pienso que si yo fuera de esas mujeres, si Dios quisiera eso para mi, me lo indicaría. 

Lo que yo ahorita siento es que por ahí no va. 

Siento a Cecy rara, como distante. 

lunes, 13 de noviembre de 2023

 Siento todo tan extraño y me cuesta mucho trabajo explicarlo. 

Me cuesta poner en palabras lo que no me gusta de lo que nos está pasando. 

Quisiera entender por qué me siento así pero todo esta como enredado. 

Siento que me marcas pero estas esperando a que yo te diga algo, pues te quedas callado por largos lapsos de tiempo. 

En las llamadas me preguntas qué he hecho, cómo me siento, qué haré... cosas que contesto con facilidad pues ya sabes que no tengo problemas para hablar. 

Y después nada.

Siento que no sabes qué decirme. Medio me platicas lo que haz hecho.

Pero no siento ganas por verme, nunca me dices algo así como "pues ya te extraño un buen y muero por verte" 

No me cuentas planes, cosas que te gustaría hacer conmigo... solo no sabes qué decirme. 

Trato de no molestarme por ello pues me repito que eres tímido, que solo no quieres incomodarme pero en realidad... es como si estuvieras apagado, como si fueras seco. 

Generalmente envidio tu rutina pues llegas con tranquilidad al trabajo a tomarte un café, tienes oportunidad de ver el amanecer, platicas un rato con fortu o te das vueltas por el almacén.

Cosas de las que quizá tu ya estas harto pero yo las veo como una bendición pues yo casi no tengo tiempo para tranquilizarme. Para ver el almacén o sentarme a tomar un café tranquila.

Y cuando lo tengo hasta siento que estoy perdiendo el tiempo y me pongo a hacer cosas. Sé que el problema no es que no tenga, en realidad mi problema es que no me lo doy porque mi tiempo prefiero utilizarlo en otras cosas.

Pero igual... a ti te siento negativo sobre tu vida. 

Quejándote sobre si tienes que ir aquí o allá. Quejándote sobre si no tienes nada que hacer... o a dónde llegar a "descansar" 

Te siento negativo... y no puedo evitar sentir culpa... sentir como que de alguna forma yo tengo la responsabilidad. 

¿Por qué? Quizá porque sé que no tienes a dónde llegar y yo tengo mi casa.

Y siento que debería ofrecerte venir... que finalmente nuestros problemas. Los tuyos y los míos... aunque son diferentes... al final cuando unimos fuerzas, todos los problemas bajan un poquito. Se hace menos pesada la carga.

Y aunque eso fue lo que te propuse en un principio, en el inicio de nuestra relación... aunque eso fue lo que te dí... no me llenó pues aún estando aquí pasaba que despertabas con mal ánimo, despertabas de mal humor, triste, enfadado o sin ganas. 

Ni tu mismo te comprendes a veces y eso es válido supongo que eso nos pasa a todos. Pero el problema es que no sabes qué quieres ni qué decirme y prefieres callarte para "no incomodar" y en cambio me sigues en mis planes, en mis ideas, en lo que se me ocurre hacer pero en realidad no te hacen feliz como a mi y puedes aparentar que sí al principio hasta que después te cansas y te hartas y empiezas con tus caras. 

Yo comienzo a preguntarte qué pasa, qué tienes, a lo que tu respuesta siempre es que no pasa nada, que no tienes nada... pero aunque sonríes, la sonrisa no te llega a los ojos... y solo me dejas con esa horrible sensación de que primero no soy lo suficiente para ti, segundo en realidad no eres feliz y tercero que no hay la confianza suficiente para que me digas las cosas y lo afrontemos juntos... quizá añadiría una cuarta que es que empiezo a sentir también enojo, a preguntarme como es que teniéndolo todo... no logras sacarle jugo a la vida y echarle ganas. Que soy suficiente, que merezco ser feliz y que alguien quiera ser feliz conmigo.

No te niego que sé que muchas veces haz cambiado tu actitud, te lo reconozco y lo veo. Pero son cosas que duran a penas un rato. No espero que estes todo el tiempo bien, no espero que seas siempre el mismo. 

Somos humanos, somos personas... no somos un robot que trabaja en automático siempre igual. 

Pero me refiero a decisión, a compromiso, a ganas de estar conmigo y que eso... que lo que podemos construir juntos pese más que cualquier problema. Pero no pasa pues como no sabes lo que quieres... solo crees saber y tratas de dar lo mejor de ti... pues ahí vas. 

Dándole como mi lema es. Pero supongo que mi lema no aplica en su totalidad para ti... pues somos personas diferentes. Y creo que tu necesitas algo más que solo seguir dándole una y otra vez. 

Necesitas encontrar un sentido, un motivo, un objetivo y siento que yo no lo soy... De serlo pienso que la realidad actual, las cosas y esta conversación serían diferentes. 

Siento que generalmente yo te busco, armo los planes, pienso en a dónde ir o qué cosas hacer en el día. 

Generalmente no tengo problema para hacerlo pues siempre tengo cosas que me gustaría hacer. 

Pero también me gustaría sentir tu apoyo en eso. 

Que tuvieras iniciativa. 

Tengo toda clase de días. 

Días con excesiva energía, con entusiasmo y ganas de hacer las cosas. 

Y tengo días en los que me quiero tumbar.

Pero en definitiva en ambos quisiera tener apoyo y compañía.

Y tu me volteas a ver... en tu mirada veo que me seguirías hasta el final de la tierra. 

Pero todo sigue como cayendo en mí. 

En que yo tome la decisión, en que yo diga, yo proponga, yo presione....

No es una aventura de dos. 

Son mis aventuras y tu me acompañas.

Así lo siento. 

Yo tengo que decir si sí o si no. Yo tengo que ser prudente, pensar en todas las variables.

Yo tengo que preguntarte si te deposito a la cuenta de Banorte o a la de Banamex

O ni siquiera preguntarte. 

Yo debo acordarme que debe ser a la de Banamex. 

Yo te tengo que recordar que iremos a las fiestas de octubre y preguntar si tienes presupuesto suficiente como para ir o si va a ser como que yo sola me armo mi cita y tengo que planear mis finanzas para autosostenerme y cada quién va por lo suyo. 

Si no tienes dinero para apoyarme con la comida o algo de mi casa, ni te paras por aquí así no hay nada que exigirte. Y es mi problema .conseguir qué comer.