domingo, 24 de mayo de 2020

07:23 am

Hoy quise levantarme un poco más temprano para ver el amanecer.
Tampoco es la gran cosa... pero necesitaba por un día escuchar la paz de la mañana.
La paz del silencio y la no presión de mi familia.
Yo quería levantarme como a las 6:50 para ver el cielo todavía gris.
Pero se me cerraron los ojos.

Oír a los pájaros despertar y el olor de la mañana me recuerda a cuando estaba desde temprano en el Tec y no tenía clases.
Cuando me iba al gym como a las 5:30 de la mañana y ya a las 7 estaba bañada con mi mochila caminando por enfrente de la biblioteca.
Ahí... el mundo era sencillo.

El olor a café si pasabas por enfrente del starbucks y a mi me gustaba meterme a la biblioteca a leer.
Hace un año me despidieron ya para estas fechas de Geodis.
No hubo nada más crudo, amargo y liberador que eso.
De pronto no importaba la hora que era.
Lo que había hecho, los esfuerzos que había dado por mostrar mi mejor cara, mi mejor actitud, mi disposición y mi ganas de aprender.
La gente a la que le había caído bien (o al menos eso intenté para llevar la fiesta en paz), todo lo que ya había asimilado cómo hacer...
El tiempo...

El tiempo era otra vez mío.
Además, abuelita estaba enferma.
Y verla así... me hacía darme cuenta que no quería desperdiciar mi vida en intentar que me "reconocieran" en un trabajo, vieran "aptitudes" en mi y quiseran elevarme de nivel.
Soy muy mala siendo lambiscona con la gente.
No me sale.
Pero dice papá que así es la vida. que te ponen gente "tonta" de jefe y tienes que adaptarte y dar lo mejor que se pueda, jugar muy bien tus cartas para resaltar.

Ayer me dijo que tenía que ser activa,
que me callaran las veces que me callaran pero que no dejara de "alzar la mano"
Puff... pues alzar la mano es fácil.
Total... si por decir lo que piensas que no creo que sea nada del otro mundo, ya no te van a tomar como alguien "pasivo" sin intereses o iniciativa... pues supongo que puedo hacerlo.
No soy así... y eso es lo que no me gusta.
Quiero decir... que si la gente no puede ver mi trabajo, mis esfuerzos... no me gusta estarlos resaltando.
Pero dicen mis papás que así son las empresas ahora... o que quizá siempre han sido así pero que ellos no se habían dado cuenta hasta ahora que papá esta como esta.

Solo sé que yo nunca me rindo.
Y no me rendiré ahora.
Gano bien dentro de lo que cabe y sé que podré ganar mejor.

Ya casi se acaba el home office...
No sé si ya casi se acabará el coronavirus también.
La verdad es que no lo creo.
A penas van tres meses.
Yo siento que ha sido una eternidad.
Pero ¿ir a la oficina otra vez?
Puff...
Volveré a la cama.

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