jueves, 16 de enero de 2020

Me gusta pensarte...
Pensarte mientras escucho tu música.
Porque por pensar no pasa nada.
Pensar y recordar.
Y me da paz.

La magia ocurre sin darnos cuenta.
Y ese suceder sin avisar es magia en si misma también.
Entonces son como dos magias ocurriendo al mismo tiempo.
Bueno, prefiero verlo asi que pensar que el que no te des cuenta de que sucede, sea lo que lo hace mágico.
No creo, porque entonces cuando me doy cuenta ¿qué sucede? ¿deja de ser magia?

Es lo que se me hace triste de las oficinas...
Que no he sentido magia.
Ni perceptible ni oculta.

No hay comentarios: