sábado, 4 de enero de 2025

Dejarte sentir: cada que quieres escapar es porque no te dejas sentir.

 No es nada más hacer introspección sino ir bajando lo conceptos y pensar qué puedo hacer con esa información. 

Cuando decides diferente en una situación igual, el sentimiento es impresionante. 

¿A qué me gustaría dirigir mi dedicación y confianza este año?

De lo cómodo que realmente es tan cómodo que es mejor irnos.

¿Cómo se porta la versión de mi que más se quiere y se respeta?

1. Temática de tu año,

2. De qué te despides

3. Gratitud,

4. ¿Qué sentimientos tenemos estancados que no nos han permitido vivir en sentimiento de abundancia, conexión?

- Inseguridad, aunque me cuesta trabajo definir a qué le tengo precisamente inseguridad... de dónde nace. Creo que al perderme a mi misma, a no poder recuperarme pero si algo he aprendido este año ha sido a no soltarme, 

Pero sentí mucha inseguridad de no poder proteger mi energía ante Alonso, incluso en algún momento tuve miedo de no poder protegerla ante Roberto.

Pienso que construí una fortaleza en mi corazón, me la creí que yo era muy especial y cuando me tocaba defender esa idea no supe. 

Una parte de mi no se quería ir de Alonso con sentimiento de inferioridad, no quería que él se quedara con la idea que yo era una niña estúpida a la que había sabido manejar. Pero a este momento de la historia... por una parte siento que he dejado muy claro mi punto de no ser estúpida, de hecho de que valgo muchísimo y que la que decide ya no continuar con esta convivencia enfermiza soy yo. 

Hay sentimientos más profundos que me da miedo incluso a penas rozar... como el frío que siento cuando a veces percibo que la gente no hace mancuerna conmigo y no quiere acompañarme ya sea en mis proyectos o simplemente a pasar tiempo conmigo. 

Podría ser como una herida del rechazo o del abandono. Ese sentimiento me da pánico y creo que el día de hoy lo sentí de nuevo. 

Pues creo que es herida del abandono, ya lo investigué en ChatGPT. Cuando me dejan sola en ciertos proyectos o en ciertas circunstancias en las que REALMENTE no quiero estar sola y busco a toda costa ayuda. 

Me pasó el lunes cuando me fui huyendo a casa de mis papás y me pasó ese domingo horrible que Alonso tampoco se quiso quedar y le marqué a Ángel. 

Marguga dice que a veces debemos dejarnos sentir esos momentos incómodos que llegan en los momentos más inoportunos y que a veces el solo dejarnos sentir eso, nos permite avanzar. 

Entonces hoy lo puedo comprobar pues me permití sentir al ir al super ese sentimiento de abandono y lloré y lloré y no sé si lo traté de evadir al beber alcohol y terminar dormida y después mi necesidad de recuperar mi cuerpo y mis buenos hábitos me llevaron a ir a caminar y dejó de ser el tema la soledad. O bueno sí lo fue pero caminar me resulta tan terapéutico porque de pronto es como si ese momento sola lo eligiera yo y yo tomara las riendas de mi vida... el siempre tener la posibilidad de volver a elegir, de preguntarme qué necesita esa Gaby que esta sola y decirme que yo me lo puedo dar. Que si yo necesito compañía, yo me la puedo dar, que yo estoy aquí para mi para llevarme a dónde yo quiera y escuchar la música que yo quiera, leer, escribir o simplemente sentir esas inmensas y espantosas emociones que llegan como un torbellino a nublar mi cabeza pero tener la inteligencia emocional de saber que por más terrible que se sienta, esa emoción se va a ir, solo durará máximo unos 10 o 15 minutos y que me sentiré mejor después pero que debo permitirme sentirla sin caer en comer mucho o en autodestruirme a mi, mis hábitos, mi cerebro, mi autoestima y mis relaciones. Solo son emociones y no debo temerles. 

Fue una soledad extraña pues no tuvo nada que ver con Alonso de quién en verdad no tengo ninguna gana de saber nada, fue miedo a la soledad con mi familia... y es extraño porque ellos están ahí o sea literal si yo quería podía irme manejando con ellos pero no lo hice... es tan extraño. Porque muy en el fondo y por más extraño que suene... yo sabía que esa sensación solo tenía que ver conmigo y con nadie más, que era algo que tenía que afrontar. Que ni ellos ni yo tenía la culpa de nada, que al final todos estamos solitos y todos tenemos nuestros intereses y que yo tengo que aprender a conocerme a tal punto como dice Alonso de yo saber qué es lo que me tranquiliza y dármelo a mi misma para estar mejor. 

Entonces los sentimientos estancados fueron... 

1. Inseguridad de "no ser suficiente" ser solo una charlatana que habla mucho pero que en realidad no sabe hacer las cosas. 

2. Miedo al abandono.

3. No poder con mis propias metas, no saber sostener lo que es importante para mi. 

Pero son solo eso, emociones y aquí se liga con la segunda pregunta de Marguga.

¿De qué te despides?

Me despido de esa sensación de inferioridad, de no valer lo que yo considero que valgo, me despido de esa auto-exigencia inhumana. Quiero estar tan consciente del trabajo que me ha implicado construirme para que, como dice Marguga, ya no decida auto-abusarme ni sabotearme. Me despido de esa parte de mi que no me permite ser humana, que no me permite sentir incluso lo que no me encanta tanto de mi, lo que no me permita victimizarme, que no me permita sentir enojo, frustración, ansiedad, decepción. 

Entender y ver desde un lado de compasión conmigo misma y empatía que nadie te enseña a sentir las emociones complicadas Gaby, porque siempre van a llegar cosas externas que no sabemos ni cómo, en qué condiciones. 

Yo me tenía, yo en verdad necesitaba pedirme perdón. Me cansé demasiado, cruzó mis propios límites, abusó de mi, de mi energía, mi bondad, mi empatía y hacerme un sistema para no volver a llegar a ese punto. 

Me despido de no darme mi lugar, de cruzar mis propios límites, 

Me despido de abusar de mi, de mi energía, de mi bondad, mi empatía.

Me despido de estar con personas en las que me tengo que salir de mi. 

Me despido de negociar lo que me ha costado trabajo construir,

Me despido de exponerme a lugares dónde fácilmente me puedo destruír. 

Me despido de compartir mi energía super alta en un espacio incorrecto,

Me despido de que otros me "nivelen" me "regulen"

Orar no es para conseguir cosas es para estar en un estado, un cómo queremos estar. Realmente ¿qué estamos buscando? Estemos dónde estemos, estamos cómo estamos. Tendrás el día según la energía que traigas. ¿Estas buscando paz? ¿Estas buscando formar parte de algo más grande que tu? Como cuando el estado interior de otra persona tiene un impacto en ti. Hacer las cosas porque te hacen bien y no para conseguir algo. 

"Me permito estar en un estado elevado de mi realidad"

Cuando cuido mis hábitos, dormir mejor, hacer ejercicio, comer mejor, mi diálogo interno, mi espiritualidad

"Me permito quedarme con el resultado que este esfuerzo me trae y no busco auto-sabotearme a través de personas, lugares, etc."

1. Temática de tu año

Creo que sería no soltarme a mi. Ese fue mi tema. Porque aunque pareciera que me dediqué a desarrollarme en aquello que siempre me había llamado la atención, que me daba curiosidad... constantemente estuve trabajando con un sentimiento de mantenerme auténtica

Seguir mi intuición, perseguir mis intereses aunque todo apuntara a que quizá debía poner los pies en la tierra y no estar tanto en el cielo. Que aunque aprendí mucha teoría y técnica sobre el cómo entrenar y qué es lo que se supone "correcto" había una voz en mi interior que me decía que debía ser fiel a lo que yo creía cierto. Pienso que todo el año se trató justo de eso, de aprender a equilibrarme pues me había fortalecido tanto que me sentí lista a exponerme a realidades diferentes y me llegó de todo y en un principio no sabía administrar las cosas externas que llegan en condiciones impredecibles. Creo que también me salí mucho de mi zona de confort pero ese no era el objetivo, el punto era no soltarme. Esto incluye hacerme cargo de mis emociones y no dejarlas en manos de otros. Defender mis ideas, valorarme más, cuidarme, darme mi lugar.

3. Gratitud

Me agradezco mucho a mi misma pues me enfrenté a muchos retos para los que nunca antes había tenido el valor, estuve en contacto con energías que antes no conocía y me di la oportunidad de experimentarlas. 

Nunca me dejé caer, por muy pesada que sintiera a veces la vida, recuerdo mucho el aletargamiento tras cada vez que bebí alcohol, pero recuerdo también las ganas de salir adelante como cuando salgo a caminar. 

Me agradezco que escuché muchísimos podcast, escribí mucho, me organicé mejor, hice planeadores, nunca dejé de entrenar, he intentado tratar mi ansiedad de formas creativas. Me agradezco este año porque sobre todo me he metido la idea que sigo aprendiendo, que todo el tiempo lo estoy haciendo. 

Me agradezco que dejé ir cuando tocaba, me agradezco que me aventé a darlo todo cuando tocaba también, me agradezco que he cuidado mi energía incluso cuando no lo sabía, cuando no entendía ni cómo pero que no me quedé conforme, que seguí moviéndome, la cuidé. 

Me agradezco que me he cumplido lo que me he dicho que haré. Como terminar el Visión Board, organizar mejor el cuarto de los gatos, me agradezco que he mantenido vivas a mis plantas y a los tíbicos también. 

Me agradezco cada limpieza que le he hecho a mi casa por mi misma. 

Me agradezco que me atreví a crear pues cada entrenamiento no existía y lo saqué de mi cabeza y de mi experiencia.

Me agradezco que me di la oportunidad de experimentar la sensación de merecimiento, de salir con muchos chicos PORQUE SÍ, PORQUE SE ME DABA LA GANA! Me agradezco que pude comparar el tipo de citas que me ofrecían, el tipo de planes, los lugares, las atenciones que tenían conmigo, qué era simple educación arraigada condicionada y qué era realmente un interés genuino por mi, por mi persona y mi bienestar, que pude evaluar los diferentes entornos y energías que cada uno de ellos implicaba para mi vida y reconocer que siempre puedo elegir a qué sí o a qué no le quiero entrar porque al final de cuentas, es MI VIDA.

Me agradezco toda la inspiración que busqué siempre, que seleccioné el tipo de contenido que quería ver y el tipo de información que quería recibir. 



No hay comentarios: