Otra vez yo pensando.
Estoy sentada en el sillón de mi casa, pensando en que hacer, solo recuerdo que me choca hacer tarea y que ahora que no tengo tarea que hacer no sé que hacer.
E estado metida en la compú como 1 hora y media, charlando con el único amigo con el que tengo ganas de platicar en el MSN.
No sé si esté mal alejarme del mundo y es que siento que jamas entenderían como me siento, todos tenemos cosas en nuestras cabezas, todos tenemos nuevas ilusiones y nuestros problemas y cada quien lo resuelve como quiere.
Estaba pensando en mis amigas que tienen problemas,que se la pasan sufriendo y autocompadeciendosé de si mismas, culpando a todo el mundo de lo que les pasa y esperando que el mundo las trate de una manera especial por lo que están sufriendo, a mi me gusta ayudarles a que se levanten pero poco a poco yo también me fui haciéndole una de ellas, pero nadie se compadeció de mi nunca, nadie me ayudó y me detuve a pensar que cada quien tiene su vida y que si te quedas esperando nunca saldrás adelante, entonces salí de su circulo de depresión y autocompasión y trate de hacer cosas para ser feliz a como diera lugar y entonces conocí a mi mejor amigo, del que hablaba hace poco, él siempre sonríe y le vale si los demás lo entienden o no, él tiene su vida, él toma sus propias decisiones aunque vaya en contra de la corriente de los demás, defiende sus convicciones y no le afectan el resto de los comentarios; eso me encanta de él.
Me libere, me separé de mis amigas y voy por la vida conociendo cosas nuevas, disfrutando de las cosas que siempre están y que nunca vemos.
El otro día le platicaba de esto a una de mis amigas (la que más se autocompadese de si misma, aunque la verdad si tiene unos problemones) y me dijo: "ai no me salgas con tus choros de monja y de viejitos", la verdad me enfureció su comentario, pero me guarde el enojo, "no vale la pena, que ella se amargue" pensé.
El otro día me quede a dormir con mis abuelitos y la verdad no tenía muchas ganas, por que mis abuelitos me quieren mucho y siempre andan muy serviciales y como yo siempre ando en mis rollos en mi cabeza a veces paresco espirituada y pues me siento grosera con ellos, pero también ya van varias veces que les digo que no y pues el caso es que terminé llendo.
Al siguiente día estabamos desayunando y le llamarón a mi abue, resultó ser su comadre, iban a tener una fiesta ellos, sus primos (de mi abuelita) y sus sobrinos.
Y que de paso fueran a visitar a su tía (de mi abuelita, ya muy grande la señora).
Mi abuelita dijo que sí y nos llevo, lo primero que pensé fué: "asch, fiesta con viejitos amargados que se la van a pasar quejandose de la vida y me van a deprimir más".
Pero bueno, le dí una sonrisa a mi abue y fui.
Llegue y me senté en la mesa después de saludar a todos los señores y señoras de la tercera edad, empezó su platica y ahí lo que nunca imagine empezó.
Su platica básicamente es sobre sus recuerdos: "y ¿te acuerdas de cuando lo conosiste? jajaja estabas súper emocionada, quien iba a decir que se terminarían casando y estarías ahorita con él jajajajaja"
Hablaban sobre las nuevas enfermedades y sobre las causas de ellas, pero descubrí que eran personas tan optimistas, recordaban su pasado y vivían su presente felices, platicaban sobre lo que habían hecho el día anterior y sobre la gente que conocían y descubrí que mis amigas decían que ellos eran unos amargados, quejumbrosos, pero en realidad eran tan optimistas, solo pensaban en lo bueno, se cuidaban para vivir lo más saludable posible y te incluían sin descriminarte, me hicieron manicure jajaja y conocí a la tía de mi abuelita, yo me la imaginaba acostada en la cama y que me deprimiría pero era una señora delicada, de esas que sientes que las puedes romper con un dedo, tenía su ropita cálida y olía a abuelita y estaba sentadita, sacó sus fotos y nos las enceñó.
Fue una experiencia maravillosa y descubrí que discriminar a las personas por que les gusta hacer las cosas de alguna manera es tonto, es ser ignorante, idiota y estúpido, por que es no darse cuenta que en este planeta existen muchas personas y que no somos lo únicos, que seamos diferentes no significa que tengamos que soportar a lo demás, mucho menos criticarlos; significa que hay que respetarnos.
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